La accesibilidad es un derecho de toda la poblaci�n que adquiere su mayor relevancia en aquellas personas que tienen una discapacidad, algo que en Andaluc�a afecta a m�s de 700.000 ciudadanos, el 70% con una movilidad limitada. Sin embargo, se estima que en torno al 40% de los andaluces puede beneficiarse de la supresi�n de barreras, porque ello revierte tambi�n en las personas de edad avanzada y en aquellas con circunstancias transitorias que afectan a su movilidad, a causa de un accidente o de la maternidad. El Gobierno andaluz, consciente de la importancia de la accesibilidad, est� implantando diversas medidas para favorecer su impulso. As�, ha aprobado un decreto que regula las condiciones de accesibilidad que deben reunir las v�as p�blicas, edificaciones y transportes, para permitir su utilizaci�n por el mayor n�mero de ciudadanos posible y, especialmente, por aquellos con discapacidad. Este decreto de la Consejer�a para la Igualdad y Bienestar Social supone un importante avance en las exigencias de accesibilidad y extiende sus efectos a entornos naturales y a nuevas instalaciones o edificaciones. En concreto, en los espacios naturales, cuando se realicen actividades recreativas, educativas, culturales o an�logas, se exigir� al menos un itinerario accesible a los senderos o v�as generales de recorrido. En las playas, adem�s de contemplarse la exigencia de itinerarios accesibles sobre la arena, ser� obligatoria la dotaci�n de sillas anfibias o ayudas t�cnicas similares cuando haya servicios de salvamento. En cuanto a las piscinas de uso colectivo, adem�s de regular la accesibilidad de las instalaciones, el decreto exige que haya una gr�a, escalera o rampa para entrar en la misma piscina. Viviendas En relaci�n con las viviendas de nueva construcci�n, los edificios deber�n disponer de un ascensor cuando sean de tres o m�s plantas (dos si hay al menos siete residencias), con la obligaci�n de que llegue hasta el aparcamiento y la azotea. Respecto a los inmuebles reservados a personas con movilidad reducida, la norma extiende a todas las estancias las condiciones de accesibilidad, hasta ahora limitadas al sal�n principal y a uno de los dormitorios. En las promociones, se reduce de 33 a 17 viviendas el m�nimo exigido para que cuenten con una reserva de pisos accesibles. IBS Ba�o adaptado accesibilidad minusv�lidos N/P2 Cuarto de ba�o adaptado. Entre las nuevas condiciones para los medios de transporte colectivos, se ampl�a respecto a la normativa estatal del 10% al 15% la proporci�n de autobuses interurbanos accesibles que deber� tener cada compa��a respecto a su flota total cuando disponga de diez o m�s unidades. V�as p�blicas Igualmente, se mejoran las condiciones de accesibilidad en las v�as p�blicas, con especificaciones t�cnicas orientadas al aumento del ancho de los itinerarios peatonales, la rebaja de las pendientes de las rampas y el incremento del n�mero de plazas de estacionamiento de veh�culos reservadas para personas con discapacidad, que pasan de 1 por cada 50 a 1 por cada 40. IBS Aparcamiento accesibilidad minusv�lidos N/P2 La norma contempla un incremento de plazas reservadas a personas con discapacidad. En lo que se refiere al ancho de los itinerarios peatonales, pasan de 1,20 a 1,50 metros, y la altura m�xima de los bordillos se reduce de 14 a 12 cent�metros, mientras que las pendientes m�ximas de las rampas tendr�n que reducirse del 12 al 10%. Tambi�n se regulan los carriles reservados a bicicletas contiguos a los itinerarios peatonales, con una se�alizaci�n diferenciada en textura y color. Finalmente, en el �mbito de las administraciones p�blicas, el decreto se�ala que, en el plazo de un a�o desde su entrada en vigor, deber�n llevarse a cabo las adaptaciones m�nimas en sus edificios para posibilitar el acceso a las zonas de atenci�n al p�blico. La Junta dio a conocer en abril de 2010 la nueva normativa andaluza en el transcurso del Foro Internacional sobre Accesibilidad Universal, en el que participaron m�s de 250 personas. A trav�s de este encuentro, se difundieron tambi�n las ventajas de la accesibilidad para la sociedad en su conjunto. As�, responsables de diversas administraciones p�blicas, miembros de iniciativas europeas, profesionales, docentes y estudiantes universitarios, junto a representantes de entidades de personas con discapacidad, pudieron analizar las novedades que supone esta ley.

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